miércoles, 25 de octubre de 2023

Agua entre las manos

Ella será siempre así. Una caricia fantasma, una carcajada mirándonos a los ojos. La leve estela de una vida feliz, la insoportable laguna de lágrimas que desbordaron nuestro estanque. 

Ella se quedará aquí, yo me quedaré allá, pero hoy más que nunca entenderé que al tiempo nada lo hace volver. 

Ella ya no llorará, algún día, no llorará más. Yo me ahogaré para siempre, mientras respire.

¿Que si cómo se siente? Como intentar detener el agua entre las manos que poco a poco escapa, mientras la humedad prevalece, no se va ni se irá jamás. 


No sé si te olvidaré cuando estés en Madrid...